Los días eran más luminosos.
Los jardines más floridos.
Las noches tenían más esperanza.
En su silencio,lo salvaje estaba llamando
Los deseos fueron susurrados
El tiempo estaba allí
Pero sin un significado.

Lejos, lejos en el tiempo..
Cada sueño es un viaje lejos..
Lejos de una casa,lejos del cuidado..
Donde quiera ir el corazón sólo es un viaje lejos.

Los días partieron
Los jardines desiertos
Este mundo frágil
¿Mi único descanso?

Lo salvaje no llama más...
Deseos tan huecos...
El Muchacho Descalzo...
Llorando en una noche vacía..

A lo lejos...

Aprecia el momento..
Elévate a los cielos...
No dejes al soñador,
marchitarse como el césped..

Sin caer por la vida,
una ganancia por cada pérdida..
El tiempo me recogió,
pero me mantuvo volando..

"Por este regalo de sueño debo pagar el precio...
Con la pérdida de los placeres de la vida"

Hace tiempo tu y yo solo nos mirábamos a distancia, cuando chocaban tratábamos de disimular aquel escalofrío que recorría por nuestros cuerpos...Me dolía el simple echo de verte y saber que no podía estar contigo aunque también me reconfortaba el ver que tu me seguias amando como la primera vez...
Por temor al dolor ya que te amaba tanto cometí el error de ser por un tiempo de otro hombre,me besaban sus labios pero para mi eran los tuyos los que lo hacían,me acariciaban sus manos pero para mi eran las tuyas las que me daban placer,cada noche a la hora de dormir pensaba en ti y después soñaba contigo y las pocas veces que te veía el corazón golpeaba con fuerza mi pecho.
Aun así por ser fiel a mi error me resistía a tu cercanía cuando te ponias frente a mi,trataba que no se me notara el temblor de mi cuerpo cuando pasabas por mi lado y me rozabas,me quedaba con el veneno amargo que solo tus labios podían endulzarlo por no poder besarte......me moría de ganas de decirte cuanto te amaba aunque nuestras miradas hablaban por si solas.....
Por suerte el destino es caprichoso mostrando la verdadera cara de aquel con el que estaba,la cara del traidor que no respetó nada, puso un obstáculo entre mi error y yo haciendo de nosotros una separación para unir a los amantes destinados a estar juntos....tu y yo.
Por fin puedo decirte te amo,por fin son tus manos de verdad las que me acarician y no producto de mi imaginación, al fin soy solo tuya.... amor mio se acabó la distancia ahora estamos juntos como en su momento debió ser...Nunca es tarde si la dicha es buena y tu amor siempre mereció la pena.

Dedicado al hombre que tuvo,tiene y tendrá mi corazón por y para siempre. mi dueño..

Allá en la esquina hay miseria
y tu madre recoge un poco de ella
cuando grita tu nombre.
¡Anda ve y acuérdate de sus ruegos,
de cuando eras niño y la amabas
como a tierra bendita;
deposita en ella caridad y justicia;
el hombre bueno es misericordioso!
Desvelada, protegía tus cabellos
como a las semillas del campo de tu abuelo,
porque ahí comías y te levantabas
con el perdón en las rodillas;
y en colegio su nombre era coreado por maestros,
compañeros de aula y el eco de los claustros.
Ahora te andas con un pie a tientas
y descubres en el cielo un hoyo negro,
afiebrado te acercas al Cristo y le retiras su cruz,
y ésta te cae como un latigazo en el alma.
¡Abraza a tu madre, hijo!
devuélvele un poco de ti y de tu padre,
compartiendo la mesa con las rosas del campo
de tu abuelo, y enciéndele los ojos,
recogiendo en las esquinas
tus miserias perdidas.
¡Enciéndele la vida, hijo,
y entrégale tu corazón,
ese pobre corazón cautivo, entrégaselo;
ella derramará sus lágrimas sobre él,
y tú volverás a ser tierra fértil!

Rara vez es la que persigo la informalidad de tus caricias,
que me postro ante ti como un risueño mendigo,
que elaboro circunstancias imperfectas para deshojarte
en una flor o en una marejada de hierba, que eres todo
o nada para mis épicos desafíos.

Que sucumbo ante tus formas, ante tus senos promisorios,
que arrastro el desdén de no asimilar el manjar
que me provocas con tu cuerpo anochecido.
Que me has puesto un pie sin forma sobre el pecho,
dejándome la ira hecha un calvario, y el sueño, un detonante tardío.

Que eres la mujer conquistada, yo el hombre enamorado,
amantes de un mismo verso que enloquece y agiganta